Mi solución:
- Cómprate tu propia sartén. Una de tamaño pequeño o mediano, de unos 15-20 € y cuídala.
- Cuídala significa limpiarla con delicadeza, usar siempre utensilios de madera, no rascar el andiadherente y si con esponja no sale la suciedad, déjala a remojo unas horas y vuelve a insistir con suavidad. Remójala más horas si es necesario. Yo suelo limpiarlas justo después de cocinar, para no quemarme las pongo boca abajo y dejo caer el agua fría con cuidado (boca arriba se puede estropear el antiadherente...).